martes, 13 de noviembre de 2012

PENA DE MUERTE

La pena de muerte, pena capital o ejecución consiste en provocar la muerte a un condenado por parte del Estado, como castigo por un delito establecido en la legislación; losdelitos por los cuales se aplica esta sanción suelen denominarse «delitos capitales».
Uso de penas de muerte en el mundo (2009):     Abolida.     Suprimida para los crímenes no cometidos en circunstancias excepcionales (como los cometidos en tiempo de guerra).     Contemplada como una sanción penal, pero ya no aplicada.     Contemplada como una sanción penal, aún aplicada.
La muerte de criminales y disidentes políticos ha sido empleada por algunas sociedades en un momento de su historia, tanto para castigar el crimen como para suprimir la disidencia política. Actualmente la pena de muerte ha sido abolida y penalizada en casi todos los países europeos (excepto Bielorrusia), y la mayoría de los correspondientes a Oceanía (com Australia, Nueva Zelanda y Timor Oriental). La mayoría de países latinoamericanos han abolido la pena de muerte, mientras que en países como losEstados Unidos de América, Guatemala y la mayoría de los estados del Caribe aún sigue siendo aplicada. En AsIa la pena de muerte está permitida en democracias como Japón e India. En África, aún se usa en Botsuana y ZambiA.
En muchos países donde aún se aplica la pena de muerte, se usa como un castigo para crímenes deasesinato, espionaje, traición, o como parte del Derecho militar.1 En algunos países se aplica también pacastigar delitos sexuales, siendo considerados como tales el adulterio o la sodomía. También se castiga con pena de muerte en otros países la apostasía, la renuncia formal a la propia religión. EnChina, el tráfico de personas y los casos graves de corrupción política son castigados con la pena de muerte. En algunos países la pena de muerte se utiliza por motivos políticos, con la máxima difusión posible, como «escarmiento» de masas: en 2007 en Corea del Norteel director de una empresa fue ejecutado públicamente en un estadio deportivo, ante150.000 personas como castigo por haber realizado llamadas telefónicas al extranjero
El tema de la pena de muerte es muy controvertido. Los simpatizantes de la misma opinan que su realización reduce el delito, previene su repetición y es una forma de castigo para el asesinato. Los detractores argumentan que no reduce el crimen en mayor medida que la cadena perpetua; son peores que el delito, son holocáusticas y es unadiscriminación de hecho contra las minorías y los pobres que puedan no tener recursos suficientes en el sistema legal.
Según el informe anual de ejecuciones judiciales de Amnistía Internacional, en el año 2003 fueron ejecutadas al menos 1.146 personas en 28 países. El 84% de las muertes documentadas ocurrieron en cuatro países: la República Popular China llevó a cabo 726 ejecuciones, Irán mató a 108 personas, Estados Unidos a 65 y Vietnam a 64. La última nación en abolir la pena de muerte para todos los crímenes fue Uzbekistán, a principios de 2008.
"El Día Mundial Contra la Pena de Muerte" se celebra el 10 de octubre.

Historia

El uso de la muerte como castigo se remonta a los principios mismos de la historia. Muchos registros históricos, así como prácticas tribales primitivas, indican que la pena de muerte ha sido parte de los sistemas penales desde el principio de la existencia de los mismos.


Argumentos en contra de la existencia de la pena de muerte.

La vida como derecho fundamental básico e indisponible para los estados.
En los países civilizados, la vida es el bien supremo por antonomasia para el hombre y la sociedad, es el "derecho fundamental" básico. La muerte es el mal absoluto, por lo que es inmoral alegrarse de la misma o provocarla para obtener de ella un provecho. El estado fue creado para proteger la vida e intereses comunes de los hombres, y no tiene derecho a quitar la vida. Además, al menos para los creyentes, la vida debe ser considerada sagrada, y pertenece sólo a Dios, quien ordena taxativamente "no matarás", y quien es el único que ha de decidir cuándo le llega a cada persona el momento de morir. Otorgar al Estado el derecho a matarnos, aunque sólo sea en determinadas circunstancias, rompe el principio de la intangibilidad de la vida humana derivada de nuestra dignidad como seres humanos, e implica que las autoridades, por motivos más o menos opinables o de utilidad pública (que pueden ampliarse en el futuro) tienen el derecho a disponer de nuestras vidas, que así dejan de merecer el máximo respeto. Si se admite que la vida no es absolutamente intocable para el Estado, los ciudadanos estaremos de hecho indefensos ante el mayor ataque posible del poder estatal, el ataque contra nuestra misma existencia, y ya no seremos ciudadanos sino súbditos, pues habremos sido degradados a la categoría de simples medios para la consecución de los fines del poder estatal. Un Estado que puede cometer "asesinatos legales" se convierte en un peligro para el ciudadano, abandona los principios de humanidad y respeto a los derechos humanos, y se pone al mismo nivel del criminal que haya matado para conseguir sus fines, con lo que moralmente no se diferencia del criminal que despreció esos valores que el Estado debería defender. El Tribunal Supremo Federal alemán resumió en una sentencia de 1995 sus reproches morales hacia la pena de muerte del siguiente modo: „Aus humanitären Gründen kann keinem Staat das Recht zustehen, durch diese Sanktion über das Leben seiner Bürger zu verfügen. Vielmehr erfordert es der Primat des absoluten Lebensschutzes, daß eine Rechtsgemeinschaft gerade durch den Verzicht auf die Todesstrafe die Unverletzlichkeit menschlichen Lebens als obersten Wert bekräftigt. Darüber hinaus erscheint es unbedingt geboten, der Gefahr eines Mißbrauchs der Todesstrafe durch Annahme ihrer ausnahmslos gegebenen Unzulässigkeit von vornherein zu wehren. Fehlurteile sind niemals auszuschließen. Die staatliche Organisation einer Vollstreckung der Todesstrafe ist schließlich, gemessen am Ideal der Menschenwürde, ein schlechterdings unzumutbares und unerträgliches Unterfangen.“, es decir: "Por motivos humanitarios, ningún Estado puede tener el derecho a disponer por medio de esta pena de la vida de sus ciudadanos. Por el contrario, la primacía de la absoluta protección de la vida exige a una comunidad basada en el Derecho, precisamente a través de la renuncia a la pena de muerte, que se refuerce la intangibilidad de la vida humana como valor supremo. Por lo demás parece ineludible exigir que se nos defienda por anticipado del peligro de la mala utilización de la pena capital confirmando su inadmisibilidad sin excepciones. Nunca se pueden excluir decisiones erróneas. La organización estatal de la ejecución de una pena de muerte es, atendiendo al ideal de la dignidad humana, una empresa de lo más inasumible e insoportable".
El fin no justifica los medios.
Ni suponiendo que la pena capital fuera efectiva para la prevención de los delitos (que no lo es), sería admisible, pues el fin no debe justificar los medios si éstos son gravemente inmorales. Sería también efectivo para evitar graves delitos tenernos vigilados con cámaras en todo momento y lugar, eliminar completamente el secreto de las comunicaciones, limitar la libertad de movimientos, vigilar a todas las personas con dispositivos electrónicos implantados en sus cerebros, permitir la tortura de presuntos delincuentes para hacerles confesar, permitir penas como las de mutilación o latigazos, etc etc., pero todo ello sería inmoral y propio de un estado policial autoritario en el que una vida digna no sería posible.

   




6 comentarios:

  1. pues la vrd yo no se estoy en contra y a la ves no pues por que ahi gente que esta loca y eso k ps k sea un asesino cereal :o nimodo k no se lo meresca ¬¬ o no se pues pero se me ase que en ocasiones esta bien :/ muy buen trabajo aby (Y)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. gracias , ps hay personas que si se lo merecen pero ps nadie debe decidir cuando muere una persona :s

      Eliminar
  2. compañera buen tema pero tu que piensas en relacion a este tema..? yo estoy encompleto desacuerdo con el compañero de arriba ya que por mas ruin que sea un persona nadien merece la muerte y menos la podem,os quitar porque simplemente nosotros no la dimos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ps en parte es verdad , pero pues yo creo que la pena de muerte no se debe de imponer.

      Eliminar
  3. creo que la pena de muerte ya no se debe de hacer es algo que es muy feo , y que nadie tiene derechos a desidir cuando alguien debe morir

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. deacuerdo contigo , cada uno debe pagar por sus delitos pero la muerte no creo que sea una buena opcion.

      Eliminar